La firma norteamericana Schlumberger confirmó su intención de vender su parte de la sociedad que tiene con YPF en Vaca Muerta.

Una de las empresas petroleras más importantes del mundo, Schlumberger, decidió irse del país y vender su participación en la sociedad que tiene con YPF en la zona que los argentinos consideran la gallina de los huevos de oro: Vaca Muerta. La firma norteamericana, que es proveedora de servicios número uno a nivel global, definirá la venta de sus activos relacionados con la producción en el primer trimestre de este año.

La crisis económica, que provocó que en la administración Macri y ahora en la de Fernández se retiren muchas firmas como Nike, Rangler, Lee, Zanella, General Mills, BRF, entre otras, es la razón que esgrimen desde la petrolera, pero también están entre las causas el congelamiento de los precios de los combustibles, los problemas para enviar remesas de divisas al exterior y la inseguridad jurídica.

Schlumberger está en sociedad con YPF en el bloque Bandurria Sur, con un 50% de participación, y donde están pendientes u$s 6.300 millones en inversiones. Este sector, junto a Loma Campana y La Amarga Chica, integra la «zona caliente» de Vaca Muerta. La firma norteamericana había ingresado en este negocio en 2017 y apenas dos años después decide su partida.

Según el diario de Río Negro, el CEO de la empresa, Olivier Le Peuch, anunció en la última presentación de estados de resultados la intención de irse de esa zona neuquina y que las negociaciones para la venta están avanzando «muy bien». «Estamos en la última etapa de desinversión y el cierre previsto será durante el primer trimestre del año, una vez que se cumplan con todas las condiciones», agregó Le Peuch.

Según la compañía estadounidense, las razones de la venta es por una estrategia de negocios para achicar gastos, más cuando el año pasado hubo proyecciones negativas sobre el crecimiento de la producción de petróleo y gas no convencional en Estados Unidos.

Si bien no trascendieron las empresas que hicieron propuestas para la compra, las firmas interesadas serían Shell, Equinor (de origen noruego).

Se considera que esta salida es una mala señal para Vaca Muerta, que, si bien tiene una de las mayores reservas del mundo, se suma una menor inversión que se está dando en esta cuenca.

Fuente: Fortuna.