Se esperan avances en el marco de la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno UE-CELAC. Organizan reunión de ministros de Economía para fortalecer los vínculos.

El mes de julio se presenta como una ventana de oportunidad para que el postergado acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea prospere, luego de quedar truncado en 2018 cuando asumió la presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro y no mostró compromiso con las pautas ambientales que impulsaba su par francés, Emmanuel Macron.

Tras cuatro años de enfriamiento, este mes, España asumirá la Presidencia rotatoria de la Unión Europea mientras que Brasil concentrará el poder del Mercosur, una coincidencia que desde distintos espacios se apunta como “central” para cerrar de una vez el acuerdo comercial entre los dos bloques.

En distintas oportunidades el presidente español consideró que existían “pocos argumentos” para estar en contra de este acuerdo. Sin embargo, más allá de los vínculos de España en general con los países del Mercosur y de Portugal, en especial, con Brasil, los especialistas aseguran que “hay varios que deben ser convencidos aún”.

De este lado del continente, el bloque ha logrado consenso sobre los beneficios de este pacto; en el plano local, el sector automotriz, uno de los que apaciguó la negociación en un inicio, ya cedió a la internacionalización.

Fechas clave
Por un lado, un avance clave se dará el próximo 17 de julio en la ciudad de Bruselas cuando se desarrolle la Rueda de Negocios que organiza la Corporación Andina de Fomenta (CAF) junto al BID y la Comisión Europea, en el marco de la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno UE-CELAC.

La CAF que se posiciona como el “banco verde” en la región y está oficiando como uno de los principales promotores en el fortalecimiento del diálogo entre los distintos bloques económicos, reunirá a líderes políticos, directores ejecutivos de empresas, directores de instituciones financieras de desarrollo y asociaciones industriales.

El encuentro favorecerá el dialogo sobre tres aspectos esenciales que son los que despiertan mayor interés de los países de Europa; desde las oportunidades de inversión en energías renovables e hidrógeno verde, materias primas críticas, descarbonización y proyectos de infraestructura de transporte, 5G y digitalización para servicios públicos, finanzas sostenibles y bonos verdes, entre otros.

El presidente de España, Pedro Sánchez, y su par de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva, coincidirán al frente de la Unión Europea y Mercosur, respectivamente.
Sin embargo, la fecha que resultará determinante es el 15 de septiembre cuando los 33 Ministros de Finanzas de los países de América Latina y el Caribe se reúnan con sus pares de los 27 países de Europa, en Santiago de Compostela, España. Los funcionarios fueron convocados por la CAF, en el marco de la Econfin, uno de los encuentros que propicia la dirección de la UE.

La invitación ya fue cursada al Ministro de Economía, Sergio Massa, pero aún es pronto para saber si asistirá y dependerá del tiempo que le deje disponible la campaña electoral, de cara a las presidenciales de octubre.

Las joyas de la inversión extranjera y cómo puede Argentina atraer más dólares

Se tratará del primer encuentro donde los 60 referentes de la economía en cada país miembro podrán buscar alinear necesidades de financiamientos con oportunidades de inversión que se proyectan en la región en temas estratégicos como Transición verde; Transformación digital y Desarrollo humano.

Por la mañana la reunión quedará restringida a los funcionarios del bloque europeo, luego se sumará la comitiva de América latina y el Caribe y se espera que todas las propuestas decanten en una hoja de ruta que fije compromisos para los próximos años.

“Históricamente América latina y el Caribe estuvo postergada de los debates de orden mundial; durante los años 80 permaneció ´enfrascada´ en temas internos y luego llegó el ´boom´ de economías asiáticas”, explicó una fuente cercana a los organizadores de la Rueda de Negocios.

Y, en esa línea indicó que “a partir de redimensionar el rol de la región a nivel global se busca configurar bloques en inversión y cooperación para analizar cómo puede integrarse mejor a las tendencias de comercio global”.

Gasoducto: la posibilidad de sustituir millones en importaciones

Según información a la que accedió El Cronista, la CAF está trabajando en la elaboración de “papers” que serán puntapié del debate donde se distinguen proyectos sectoriales; luego, se coordinarán iniciativas de vinculación entre los diferentes aliados para la inversión a través.

Además de la CAF, se suman a este impulso otros organismos multilaterales como Fonplata, el BID y el BM.

La mira en la Argentina
Con una cartera consolidada de u$s 4015 millones, que le permite apalancar recursos en 2,58 veces al capital aportado, Argentina es el país con la segunda cartera más alta de la CAF.

Para 2023 la Corporación prevé la aprobación de créditos con riesgo soberano por u$s 1.375 millones y operaciones no soberanas por u$s 625 millones. “El objetivo es seguir apoyando a la Argentina en los sectores estratégicos que impulsen el crecimiento sostenido en el mediano plazo”, indicaron desde el organismo.

A nivel soberano, este año se prevé la aprobación de créditos con por u$s 1375 millones, focalizados en el uso de los recursos hídricos en el norte argentino, en la promoción de la industria satelital en el sur del país, en el acceso a servicios claves para el desarrollo humano como la educación de calidad y en promover la integración entre los países miembros.

En el Directorio de marzo ya fueron aprobados u$s 840 millones correspondientes al Proyecto de Reversión del Gasoducto Norte (que permitirán distribuir el gas natural de Vaca Muerta hacia el norte del país) y a la Promoción del Modelo Social de Discapacidad. Luego, en julio, se aprobó un crédito por u$s 200 millones para la construcción de un acueducto en Formosa.

Los pilares de acción en Argentina que serán parte de la propuesta a los líderes de la UE en el próximo encuentro de Ministros, apuntan a:

Reducir brechas de infraestructura e integración, a través de la expansión y mantenimiento de la infraestructura física y logística, incluyendo aquella relacionada con los sectores de la energía y de las telecomunicaciones.

Apoyar el desarrollo humano garantizando el acceso a servicios básicos, como agua y saneamiento, y a sectores claves para el desempeño en el largo plazo como la educación y la salud.

Promocionar el desarrollo integral de ciudades y territorios, interviniendo en la mejora de asentamientos y en la movilidad urbana e incentivando las economías creativas y culturales como un medio de integración.

Como eje transversal, desde la CAF propician medidas tendientes a “poner en valor el capital natural y a impulsar acciones de mitigación y adaptación al cambio climático”, que se alinean con el objetivo de CAF de convertirse en el “banco verde y de la reactivación económica de la región”.

Fuente: Cronista