La provincia tiene varios proyectos que están en etapa de operación, otros en construcción y también adjudicados que cuando generen en su totalidad habrán equiparado a la energía hidráulica. Escribe: Omar Andrada.

Con el ingreso hace unos días del Parque Solar Anchipurac al Sistema Interconectado Nacional (SIN), San Juan dio un nuevo paso hacia el cambio de su matriz energética.
Es que en la actualidad ya cuenta con 11 parques solares que ya están en etapa de operación (producción de energía fotovoltaica), 4 que están en construcción y 8 que fueron adjudicados.
Eso se traduce en 192 megawats (Mw) para los que están operando a lo que se sumarán los 108 Mw. de los que se construyen para totalizar 300 Mw. Por contrapartida, en Hidráulica se generan 290 Mw. en La Olla y los diques Ullum, Punta Negra, Caracoles y Tambolar.
Por lo tanto, cuando empiecen a generar energía los 4 que faltan sumarán un total de 300 Mw. equiparando a la energía eléctrica. Pero además, hay 8 parques solares más que ya han sido adjudicados para su construcción que proporcionarán 245Mw. llevando el total a 545 Mw.
De ese modo San Juan estaría cumpliendo con creces su objetivo de migrar de matriz energética proyectada para empezar a cumplirse a partir de este año.
Sumando todo, en el territorio provincial existirán 23 parques solares a los que se agrega un proyecto combinado entre fotovoltaica y eólica y otro biomasa.
José Luis Espinoza, Director de Gestión Ambiental que depende de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable explicó a Diario El Zonda que el Estado “quiere migrar hacia las energías, limpias, renovables, no contaminantes”.
El funcionario detalló cuales son los proyectos que están en funcionamiento. “Son el de Cañada Honda (Sarmiento), los de Ullum: 4A y 4B, en la ruta que se está construyendo (Ullum – Matagusanos), Anchipurac, Albardón II, Las Lomitas y Los Diaguitas y en Iglesia dos solares”.
Entre los que están en construcción se cuentan Guañiziul II y Tamberías, en Calingasta.
Espinoza contó que todo esto se potenció a partir de programas que se implementaron para la compra de energías limpias como “Renovar I, 1.5, 2.5. Después vino el Mater y una ley que se llama Generación Distribuida que es el que cualquier particular puede generar energía e inyectar al sistema y le pagan por eso”.
Añadió que para el desarrollo de éstos emprendimientos tiene mucho que ver todo lo que se ha avanzado en la red de distribución de la energía. “Se construyeron nuevas estaciones transformadoras, tanto para líneas de alta tensión como extra alta tensión. Por ejemplo habían líneas que venían en 132 kilovolt (Kv), y en 220 Kv. ahora se ha construido una de 500 Kv”.
Amplió que “eso ayudó a que esos proyectos de privados se instalen en San Juan para poder evacuar la energía porque sin ese soporte sería imposible. Es decir que los inversionistas ubicaron las provincias que tenían una política energética seria”.
Entre las razones por las que la provincia figura en el podio de las más aptas para el desarrollo de éstas energías Espinoza aseguró: “A San Juan se lo eligió porque es una zona propicia por el tipo de sol, la altura que tiene. La mayoría de los proyectos se han ubicado en la zona oeste, Calingasta e Iglesia. Pero también hay en Ullum, Sarmiento, Albardón y la ciudad de San Juan. Beneficia la altitud, la temperatura y el tipo de radioincidencia del sol, que favorece al rendimiento de los paneles porque tienen que tener un rendimiento de operación, porque si bien la vida útil de un panel está entre los 20 o 25 años, decae con el tiempo, pero también ayuda a la eficiencia de generación el tipo de radiación que tengamos y la disposición de los paneles espacialmente”, concluyó.

Legislación

El Director de Gestión Ambiental, José Luis Espinoza, aseguró que “Argentina sacó una ley en 2010 para empezar a migrar su matriz energética a energías limpias, porque nosotros teníamos energías convencionales como las hidrocarburíferas o de combustibles fósiles, más energía hidráulica y nuclear”.
Esas energías limpias son por ejemplo la fotovoltaica, biomasa, eólica, mareomotriz entre otras.
“De la energía que llega a cada ciudadano del país el 85% es fósil dependiente. Es decir que estamos quemando combustible, emitiendo gases efecto invernadero y estamos produciendo un impacto ambiental, aparte es un recurso que se va agotando. La idea es migrar a energías limpias por lo cual se creó una ley que a partir del 2020 un porcentaje de éstas energías que se generan en el país, que se usan, se consumen tienen que ser limpias. Y en el 2025 ese porcentaje iba a aumentar”, argumentó el especialista que se desempeña que se desempeña en el ámbito de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.

Fuente: Diario El Zonda.