La petrolera estatal definió la compra de un terreno de 13 hectáreas, al sur de la ciudad. Para qué hará una obra, que demandará unos dos años, sobre el ducto ya existente que transporta combustibles.

La empresa estatal YPF adquirió un campo en la zona rural sur de Río Tercero, donde proyecta realizar una importante inversión que generará puestos de trabajo y una importante demanda de servicios y obras, por un tiempo estimado en dos años.

Tal como anticipó este diario el 1° de agosto pasado, YPF proyecta construir en esta ciudad una estación de bombeo para aumentar el volumen de transporte de combustibles (naftas y gasoil) por un poliducto que atraviesa de norte a sur gran parte de la provincia de Córdoba

La definición del lugar a adquirir demoró algunas semanas el trámite. Según se pudo conocer, la petrolera estatal firmó finalmente este miércoles 21 la compra de un campo de 13 hectáreas, al sur de Río Tercero, y propiedad de una conocida familia de esta ciudad.

Si bien YPF buscaba una superficie menor, de unas cinco hectáreas, el acuerdo entre las partes se cerró cuando la petrolera aceptó que la operación se hiciera por el total del campo de 15 hectáreas y no por una fracción.

Ahora se espera que directivos de YPF visiten a las autoridades municipales locales para detallar la realización de esta obra y comenzar con las habilitaciones. Se conoce que ya hubo varios contactos y reuniones entre ambas partes por este proyecto de obra.

Aunque la inversión que realizará la petrolera de bandera nacional no se conoce, se trata de una elevada suma que tendrá impacto en la economía de la ciudad mientras se desarrolle.

El poliducto, que tiene esa denominación porque transporta tanto nafta como gasoil en momentos diferentes, se extiende desde la planta de YPF en la ciudad de Monte Cristo (cercana a Córdoba capital) hasta Río Cuarto. Río Tercero esta justo a mitad de ese trayecto, en el que por la mayor producción desde los yacimientos de Vaca Muerta se requerirá de un transporte más eficiente. En ese marco, se proyecta esa nueva estación de bombeo.

En un primer momento YPF proyectaba realizar su inversión en la zona rural norte de Río Tercero (entre esta ciudad y Corralito). No obstante, no pudo cerrar la compra de un terreno en esa zona. Luego, la empresa tomó contacto con propietarios de tierras de la zona rural sur, donde sí pudo cerrar un acuerdo de compra.

El objetivo de la empresa estatal era conseguir un espacio en los alrededores de esta ciudad, tal como lo establecía el pliego con el que licitó esta obra. También el municipio riotercerense estaba interesado en que la obra se ejecute en su ejido.

La contratista y la obra

La empresa adjudicataria de la importante obra es Temis SA, de la provincia de Mendoza. Esa firma subcontrataría trabajos a otras.

Se conoce que los trabajos para montar la estación de bombeo sobre el poliducto existente demandarán unos dos años y que el 80 por ciento de la gente que trabajará en el proyecto será de Río Tercero y zona.

La mayor capacidad de transporte se debe aplicar sobre el poliducto que tiene 14 pulgadas de diámetro y que se encuentra a una profundidad de unos dos metros.

Si todo marcha en los plazos previstos, se estima que en aproximadamente un mes la empresa mendocina Temis comenzará a instalarse en el campo que adquirió YPF.

Esa firma demandará servicios de varios proveedores locales, personal para trabajar, maquinistas, choferes, camiones con grúas, grúas hidráulicas, vehículos para traslado de personal, entre otros.

Además, se conoce que necesitará servicios dedicados a higiene y seguridad industrial.

También se supo que necesitará alojar por unos dos años a un grupo de personas por lo que tomó contacto con hoteleros locales y también sondea el mercado de alquiler de casas en esta zona.

En el predio adquirido por YPF se sabe que habrá un importante movimiento de suelo y que se construirán diversas instalaciones como tanques y al menos un galpón. Es por eso que también se buscan empresas proveedoras de baños químicos y de vigilancia.

Algunas fuentes marcan que una vez terminada la obra, la operación y el mantenimiento de la planta de bombeo requerirá de entre cinco y siete personas con trabajo estable.

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