El colapso de un dique de contención agravó la emergencia, mientras el gobierno intensifica los operativos para proteger ecosistemas y abastecer de agua potable a las comunidades afectadas.

El gobierno de Ecuador sigue desplegando acciones urgentes para frenar el impacto ambiental del derrame de petróleo en la provincia de Esmeraldas, ocurrido tras el colapso de un dique de contención en el río Caple el pasado 25 de marzo.

De acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas, la estatal Petroecuador ha instalado nuevas barreras de contención en varios ríos y desplegado maquinaria para remover crudo y evitar que llegue a zonas pobladas o áreas ecológicas sensibles.

Las autoridades han centrado sus esfuerzos en los ríos Caple, Viche y Esmeraldas, donde equipos especializados trabajan con materiales absorbentes para evitar que el hidrocarburo se propague. También se han realizado sobrervuelos en la zona para monitorear la situación, sin detectar hasta el momento manchas de petróleo mar adentro.

Además, el gobierno activó un plan de distribución de agua potable con 50 tanqueros y habilitó una bomba de succión de agua profunda en la planta de tratamiento de San Mateo, que se reactivará una vez que las pruebas confirmen que el líquido es apto para el consumo humano.

El derrame afecta directamente al Refugio de Vida Silvestre Estuario Río Esmeraldas, un ecosistema clave para la biodiversidad de la región. En respuesta, se han reforzado los trabajos de limpieza en playas como Las Palmas, Atacames y Muisne, mientras que la Armada de Ecuador colabora en el monitoreo marítimo con tres embarcaciones.

Para seguir leyendo haga click aquí 

Fuente: Radio 3 Cadena Patagonia