Los autos eléctricos han experimentado un verdadero boom en los últimos años gracias a la disminución del costo de los insumos para su fabricación, especialmente las baterías, y los esfuerzos de distintos gobiernos para reducir las emisiones en materia de transporte. Esto último se ha traducido en subsidios para su compra y también en los planes de algunos países para prohibir derechamente la venta de autos a combustión en un par de años más.

Uno de los grandes ganadores del mercado ha sido Tesla, que casi de la noche a la mañana se convirtió en el fabricante de autos (de cualquier tipo) más valioso del mundo, superando a gigantes como Toyota, Volkswagen y GM, entre otros. Tesla es de EEUU, pero el gigante del norte no es el país que más produce autos eléctricos. Los verdaderos líderes en materia de producción están en Asia, China y Japón, más precisamente.

China era un actor menor hace un par de años, pero entró con todo al mercado de los eléctricos y no solo con autos, sino también con buses. En Chile, por ejemplo, todos los buses eléctricos del transporte público son de origen chino.

Con todo, hay que consignar que en este difícil 2020, marcado por la crisis sanitaria del coronavirus, la producción mundial de vehículos eléctricos ha mostrado una fuerte caída. De acuerdo a datos de Bloomberg, en 2019 se produjeron 4,41 millones de unidades y este año, con datos a junio, el número llega a solo 1,45 millones.

Fuente: La Tercera.