El Gobierno de Río Negro finalizó el 2024 consolidando un panorama alentador en el desarrollo de Vaca Muerta dentro de su territorio. Por primera vez, la formación no convencional comenzó a mostrar avances significativos en el sector rionegrino de la cuenca, impulsados por la empresa Phoenix Global Resources y su desempeño en exploración, que marcó un punto de inflexión para la región.

Phoenix lideró el impulso en Río Negro con importantes avances en áreas como Confluencia Norte y Sur. La empresa invirtió más de 85 millones de dólares en la primera etapa de su proyecto, procesando 228 kilómetros cuadrados de sísmica 3D. Este análisis es clave para planificar futuros pozos. Actualmente, su plataforma compartida de perforación en la región produce 4.500 barriles de petróleo diarios, lo que equivale al 20% de la producción total de hidrocarburos en Río Negro.

“La formación Vaca Muerta está demostrando un enorme potencial en el lado rionegrino de la cuenca. Las inversiones de Phoenix han sido clave para demostrar que hay oportunidades reales de desarrollo en nuestras áreas”, expresó Mariela Moya, secretaria de Hidrocarburos de la provincia.

El desempeño de Phoenix atrajo a otras operadoras interesadas en explorar el potencial de Vaca Muerta en Río Negro. Un ejemplo destacado es Cápex, que presentó una propuesta económica de 6,85 millones de dólares para el área Cinco Saltos Norte. Este plan incluye trabajos de reprocesamiento sísmico 3D y la perforación de un pozo con rama lateral, proyectando iniciar operaciones en 2025 tras completar los procedimientos de adjudicación.

Con la incorporación de nuevas áreas a la actividad hidrocarburífera, Río Negro se posiciona como un actor clave en el desarrollo energético nacional. Además de las oportunidades económicas, el desarrollo de Vaca Muerta genera un efecto multiplicador en otros sectores, como el transporte, la logística y los servicios técnicos especializados.

El Gobierno provincial confía en que el interés demostrado por las operadoras en 2024 se mantenga durante el próximo año, consolidando a Río Negro como un polo estratégico en la producción de hidrocarburos no convencionales.