El anuncio de este lunes sobre la adquisición de Endeavour por su compatriota Diamondback, por unos 26.000 millones de dólares, inició el movimiento de consolidación en el sector petróleo y gas estadounidense.

Los hidrocarburos de esquisto serán el centro de un nuevo gigante de energía generado por la operación.

La adquisición valora a Endeavour en 26.000.000.000 de dólares, incluida la deuda. Según un comunicado, el monto será abonado en totalizando 8.000 millones de dólares en acciones.

La industria se está consolidando plenamente y las fusiones y adquisiciones se producen en un entorno especialmente ventajoso, ya que los beneficios de estas empresas se ven impulsados por los altos precios de los hidrocarburos.

ExxonMobil anunció en octubre que había adquirido la empresa especialista en investigación Pioneer Natural Resources por sesenta millones de dólares. Pioneer Natural Resources también concentra su exploración, bajo los nombres Diamondback y Endeavor, en la vasta costa Pérmica del noreste de Texas y del noreste de Nuevo México.

Chevron afirmó por su parte ese mismo mes que había llegado a un acuerdo para adquirir Hess por cincuenta mil millones de dólares.

En cuanto a petróleo, esta cuenta representa 5,8 millones de barriles diarios, otro 45% de la producción nacional.