La alianza con Evo Morales y Nicolás Maduro puede costarle muy caro a Alberto Fernández.

Desde la campaña electoral advirtió sobre el manejo de la derecha en la región latinoamericana, incluso, Alberto Fernández saltó a favor de Evo Morales cuando ocurrió lo que definió como un golpe de Estado en Bolivia, también se mostró solidario con Nicolás Maduro, esto molestó a Estado Unidos que terminó lanzando una fuerte advertencia a la Argentina.

Así lo indicó el medio especializado Bloomberg, donde también informaron que una fuente cercana a Donald Trump reconoció que los lazos entre Fernández, Morales y Maduro “cruzaron una línea roja”, por lo que “podría costarle a la Argentina el apoyo del FMI y también de los fondos de inversión que fondean los campos de shale de Vaca Muerta”.

Se trata de dos puntos débiles para el sucesor de Macri en el comienzo de su gestión, teniendo en cuenta que la deuda externa es uno de los mayores dolores de cabeza de los argentinos y la explosión productiva del yacimiento petrolífero puede significar una señal positiva para intentar sostener la actividad económica un poco más equilibrada, por eso Estados Unidos sabe por donde presionar.

Cabe recordar que el Fondo Monetario es hoy por hoy el principal acreedor de la Argentina, desde que el gobierno de Cambiemos recurrió a la entidad prestadora y arreglara un acuerdo stand by que ahora heredó Alberto Fernández y su equipo del Frente de Todos.

En su artículo, el portal de noticias de Bloomberg contó que “el funcionario dijo que mientras muchos de los asesores de Fernández son pragmáticos y entienden estos riesgos, la influencia de la vicepresidenta Cristina Kirchner en el Gobierno lo está haciendo virar a los líderes de izquierda rechazados por los Estados Unidos“.

El texto firmado por Ben Bartenstein y Patrick Gillespie también resaltó que “Estados Unidos fue claro en que los gobiernos locales deben apoyar los esfuerzos del gobierno interino de Bolivia para organizar los comicios”. Este fue uno de los lineamientos que los funcionarios del Departamento de Estado le hicieron saber a los diplomáticos argentinos en los encuentros que mantuvieron en Washington, Buenos Aires y México. Otra de las condiciones fue negarle a Evo Morales una plataforma para fomentar la política boliviana.

La tensión en la relación bilateral entre los EE.UU. y Argentina se notó públicamente cuando Trump envió a su asesor Mauricio Claver-Carone a la asunción de Alberto Fernández, pero terminó haciéndose para atrás cuando se enteró que había un funcionario venezolano invitado al Congreso del pasado 10 de diciembre. El magnate tampoco se conformó con los acercamientos entre el compañero de CFK con el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa y el cubano Miguel Díaz-Canel.

Fuente: Minuto NQN.