La compañía estatal de Arabia Saudita reparó los tanques de separación de fluidos y recuperó el nivel de producción que tenía previo al ataque de septiembre. Todavía restan algunas reparaciones leves.

Los tanques esféricos que separan el petróleo del gas natural y del agua en Abqaiq volvieron a funcionar como antes del ataque.

De esta manera, Saudi Aramco recuperó parte de su infraestructura clave que le permitió volver a mismo nivel de procesamiento que tenía en esa zona en septiembre.

Aún restan reparaciones en algunas torres de estabilización de crudo que todavía están dañadas y encerradas en andamios, pero eso no le evita procesar los 9.900.000 barriles por día que produce hoy.

La capacidad máxima que tiene el reino es de 12.000.000 de barriles día y está pactado que sea recién a finales de noviembre cuando recuperen su máxima capacidad. Sin embargo, está sujeto a cambios por el vigente acuerdo con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

Para reparar todo en tiempo récord y no perder sus clientes, además de usar sus reservas y vender crudo offshore, la compañía redujo el nivel de abastecimiento en las refinerías locales y utilizó operarios las 24 horas del día en varios turnos. Una de las claves también fue el uso de otras instalaciones para procesar de la compañía repartidas en el reino.

Fuente: Río negro.